Tras un año y medio de esfuerzos concertados entre el Centro Nacional de Huracanes(NHC) de la NOAA, el Laboratorio Oceanográfico y Meteorológico del Atlántico(AOML) y otras oficinas de la NOAA, incluida la Oficina del Programa Meteorológico, se ha puesto en marcha con éxito el Banco de Pruebas de Huracanes y Océanos (HOT) en el recién diseñado Laboratorio William M. Lapenta, llamado así en memoria del difunto director de los Centros Nacionales de Predicción Ambiental. Este banco de pruebas establece un espacio de colaboración físico y virtual para investigadores y pronosticadores. Está equipado con tecnología de punta para facilitar el trabajo en equipo, como interfaces basadas en la nube, espacio de reunión para el trabajo físico y virtual, y monitores para compartir observaciones en tiempo real y pronósticos de modelos durante eventos de tormentas. El Banco de Pruebas de Huracanes y Océanos permitirá a los investigadores y pronosticadores explorar oportunidades y encontrar soluciones a los retos comunes de las previsiones, lo que dará lugar a mejores análisis y previsiones de las condiciones meteorológicas tropicales y marinas de alto impacto y de los océanos. El objetivo es que se convierta en un entorno en el que se pueda optimizar el proceso integral de análisis, previsión, alerta y respuesta.
Con el aumento de la intensidad de las tormentas y el incremento de los daños en las zonas costeras pobladas, la mejora de la precisión de las previsiones y el aumento de la velocidad de transición de la investigación sobre huracanes y océanos a las operaciones se han vuelto aún más urgentes. El banco de pruebas de huracanes y océanos se centrará en la integración de la investigación de los ámbitos oceánico y atmosférico con el fin de mejorar las previsiones, como la intensidad de los huracanes, su rápida intensificación y las condiciones oceánicas peligrosas.
A través de este banco de pruebas, los científicos del AOML y del NHC colaborarán en numerosos proyectos conjuntos, entre los que se incluye la forma de integrar los datos de los sistemas de observación en mejores análisis operativos y previsiones de las condiciones meteorológicas tropicales y oceánicas. El desarrollo de la capacidad para que los pronosticadores visualicen y utilicen los datos en tiempo real de los instrumentos basados en aeronaves del AOML y de los sistemas no tripulados, como los drones voladores, los planeadores de huracanes y los saildrones, es un punto clave de los esfuerzos del AOML para ayudar a los pronosticadores.
Además de producir mejores previsiones de las condiciones de los huracanes y del mar, los participantes trabajarán para transmitir mejor los peligros asociados a estos eventos y sus impactos previstos para la sociedad. La comunicación efectiva de estos peligros e impactos es crucial para generar la respuesta deseada por parte de los gestores de emergencias, los gobiernos, el sector privado y la sociedad en su conjunto para proteger la vida y mitigar las pérdidas materiales.
Los participantes colaborarán en un entorno de prueba aislado que imita las operaciones minimizando las barreras tecnológicas con el fin de preparar un proyecto para su uso operativo. Algunos proyectos iniciales incluyen el uso de las observaciones del radar Doppler de cola del avión Hurricane Hunter de la NOAA para proporcionar imágenes en 3D de la tormenta y franjas de velocidad del viento en superficie en tiempo real, reduciendo el error del modelo dependiente de la región. La integración del Radiómetro de Microondas de Frecuencia Escalonada (SFMR) y las evaluaciones de las sondas de caída también permitirán mejorar las estimaciones de la velocidad del viento. Con un proceso de transición recientemente revitalizado y con recursos en el banco de pruebas de huracanes y océanos, el AOML espera proporcionar más soluciones integrales que adapten las aplicaciones de investigación a las necesidades operativas y aumenten significativamente las transiciones de estado final para la investigación centrada en la creación de una nación preparada para el clima.
De cara al futuro, el banco de pruebas de huracanes y océanos mejorará la comunicación y el compromiso de otros laboratorios de la NOAA, instituciones académicas, otros organismos gubernamentales y pronosticadores mediante colaboraciones de base. También permitirá centrarse más en proyectos que aporten valor al público. Esto reforzará las interacciones entre la Investigación de la NOAA y el Servicio Meteorológico Nacional al animar a los investigadores a considerar cómo sus proyectos pueden ser trasladados a las operaciones y mostrar las soluciones de investigación a los pronosticadores en un entorno operativo para evaluar mejor su mérito. El AOML y el NHC esperan apoyar el éxito del banco de pruebas y están dispuestos a interactuar con otras oficinas de la NOAA para aportar más valor a la comunidad de previsión operativa.