La Dra. Kelly Goodwin, microbióloga del Laboratorio Oceanográfico y Meteorológico del Atlántico de la NOAA, fue recientemente una de las representantes de la NOAA en la histórica firma de la Declaración de Investigación e Innovación Oceánica de todo el Atlántico durante el Foro de Investigación Oceánica de todo el Atlántico 2022. Esta declaración representa un hito importante para la diplomacia de las ciencias oceánicas y un esfuerzo de cooperación hacia un Océano Atlántico sostenible. El Océano Atlántico es un recurso valioso para muchas naciones y requiere una amplia cooperación para establecer eficazmente un marco de gestión que aborde el cambio climático, la contaminación, la observación de los océanos, la conservación de los ecosistemas marinos, una economía oceánica sostenible y una acuicultura y pesca eficaces. Con la firma de esta declaración, Canadá, Estados Unidos, Brasil, Marruecos, Argentina, Cabo Verde, Sudáfrica y la Unión Europea han dado un paso importante hacia la protección del océano para las comunidades que dependen de él, tanto ahora como en el futuro.
Además de esta histórica firma, el Foro de Investigación Oceánica de todo el Atlántico incluyó numerosos y dinámicos eventos paralelos, en los que se trataron importantes temas relacionados con los océanos. El grupo de trabajo sobre el microbioma marino de la Alianza Atlántica de Investigación Oceánica, del que la Dra. Goodwin es representante en Estados Unidos, presentó su hoja de ruta sobre el microbioma marino para apoyar los objetivos de la Declaración Atlántica, ofreciendo recomendaciones para mejorar la alianza entre la ciencia, la industria y la elaboración de políticas. Esta hoja de ruta destaca algunas áreas clave en las que la declaración planea centrarse: facilitar la cooperación a través del Atlántico, aumentar la visibilidad de la investigación y la aplicación del microbioma marino, y promover un océano saludable y una bioeconomía sostenible. La aplicación de la biotecnología en la investigación del microbioma marino puede ayudar a resolver muchos problemas clave a los que se enfrenta nuestra sociedad, desde la seguridad alimentaria hasta la salud humana y el cambio climático.
"Una de las cosas que más me entusiasman es la esperanza y el compromiso de convertir nuestros resultados de investigación en soluciones y ampliar nuestra capacidad de inclusión, poniendo el 'todos' en All-Atlantic", dijo la Dra. Kelly Goodwin. "Esa motivación nos va a ayudar a arremangarnos y ponernos a trabajar".
Las Naciones Unidas han declarado que este decenio se dedicará a las ciencias oceánicas para el desarrollo sostenible. Los objetivos de la Alianza para la Investigación del Océano Atlántico coinciden con la misión de la ONU para la próxima década, por lo que la cooperación de las naciones firmantes llega en el momento perfecto. Juntas, estas entidades esperan "avanzar en la visión compartida de un Océano Atlántico sano, resistente, seguro, productivo, comprendido y atesorado, para promover el bienestar, la prosperidad y la seguridad del Atlántico para las generaciones presentes y futuras". Esta declaración se basa en la Declaración de Galway sobre la Cooperación en el Océano Atlántico (2013) y en la Declaración de Belmém sobre la Cooperación en la Investigación y la Innovación en el Océano Atlántico (2017), fomentando el apoyo internacional.