por Bruce T. Anderson, Renellys C. Perez y Alicia Karspeck
En un estudio reciente realizado por científicos de la Universidad de Boston, PHOD y NCAR, se descubrió un nuevo mecanismo para iniciar los eventos ENSO en los que los vientos alisios del Pacífico Norte generados por el SLP inducen cambios en el contenido de calor del subsuelo que sirven como precursores de El Niño. Este mecanismo de carga de los vientos alisios del Pacífico ecuatorial es fundamentalmente diferente de cualquier otro diagnosticado previamente, y se están realizando estudios que examinan la dinámica de los océanos de superficie y subterráneos asociada a este mecanismo.
Las variaciones de la temperatura de la superficie del mar sobre el Pacífico ecuatorial asociadas con el El Niño/Oscilación del Sur (ENSO) producen cambios en los climas de todo el mundo. Aquí reportamos evidencia de datos oceánicos limitados por observaciones para la iniciación de eventos cálidos de ENSO (El Nino) resultantes de los aumentos del contenido de calor del Pacífico ecuatorial subsuperficial relacionados con los cambios tropicales/extratropicales en la presión del nivel del mar (SLP) sobre el Pacífico Norte. Tenemos la hipótesis de que el aumento del contenido de calor es una respuesta a las variaciones generadas por la SLP en los vientos alisios del Pacífico Norte, que denominamos carga de los vientos alisios del Pacífico ecuatorial. Los experimentos que utilizan un modelo oceánico numérico de alta resolución verifican que la carga del contenido de calor subsuperficial a lo largo del Pacífico ecuatorial puede ser inducida por las variaciones de los vientos alisios generados por la SLP. Además, el análisis de los resultados del modelo numérico y las observaciones históricas indican que los aumentos del contenido de calor oceánico inducidos por los vientos alisios son lo suficientemente grandes como para iniciar el inicio de los eventos de El Niño, que maduran aproximadamente 12 meses después de que los vientos alisios se hayan forzado.
Anderson, B.T., R.C. Perez, A. Karspeck, 2013. El disparo de El Niño comenzó a través de la carga inducida por el viento del Pacífico Ecuatorial. Cartas de Investigación Geofísica, 40(6):1212-1216, doi:10.1002/grl.50200.