En 2018, los investigadores del AOML lanzaron al Océano Atlántico tropical y al Mar Caribe un surtido de vagabundos equipados con GPS para estudiar la forma en que las corrientes y los vientos oceánicos desempeñan un papel en la distribución del Sargassum. Con los datos obtenidos de los vagabundos de Sargassum junto con los datos satelitales de la Universidad del Sur de Florida, los investigadores del AOML tienen ahora la posibilidad de distribuir semanalmente informes experimentales sobre el índice de Sargassum. Estos informes estiman el riesgo de Sargassum para varias zonas costeras. Se puede acceder a los informes aquí.

El sargazo es un tipo común de alga marrón que flota en densas esteras a lo largo de la superficie del océano y representa un importante riesgo para el medio ambiente, la sociedad y la economía de las regiones del Mar Caribe y el Golfo de México. Los informes sobre el índice vinculan al Sargassum con la inundación de las playas, la degradación de los arrecifes de coral, la perturbación de la industria turística, la erosión de las costas y la anidación de tortugas marinas, entre otros efectos, en su mayoría negativos. La circulación oceánica y las pautas de los vientos rigen en última instancia la distribución del Sargassum aguas abajo. La clave para pronosticar el movimiento de Sargassum está en la comprensión del impacto de las corrientes de superficie y los vientos en sus trayectorias.
Aunque todavía no se ha identificado la fuente originaria de los parches de Sargassum, los científicos del AOML seguirán trabajando con sus asociados en la investigación en experimentos que utilicen los vagabundos y en la realización de otros experimentos de campo para comprender mejor y predecir y rastrear el Sargassum en el futuro.
