El AOML se está preparando para desplegar dos sistemas autónomos de vainas de datos con ecosondas de presión invertida cerca del límite oriental del Atlántico Norte durante marzo de 2020. Este será el primer despliegue operacional a escala completa de pods de datos, con el objetivo de proporcionar una solución de bajo costo para la vigilancia sostenida de la Circulación Invertida del Atlántico Meridional sin el uso continuo de un buque de investigación.
Diseñado por los ingenieros del AOML para hacer frente a los desafíos del acceso limitado al tiempo de la nave para la recuperación de datos, cada sistema está programado para liberar una cápsula de datos aproximadamente una vez al año y transmitir los datos recogidos a medida que llegan a la superficie. Las ecosondas son instrumentos acústicos colocados en el fondo marino que miden la presión del fondo y el tiempo que tarda un pulso de sonido emitido por el instrumento en viajar a la superficie del océano y volver. Los datos de estos Eco Sounders complementarán los de los proyectos actuales en la cuenca del Atlántico Norte, y proporcionarán la serie temporal del contenido de calor de toda la profundidad en el límite oriental. También facilitará los estudios sobre la redistribución del calor en la Circulación Meridional de Vuelco del Atlántico, que es un componente importante del sistema climático de la Tierra y cuya variabilidad influye en los cambios del clima.
Los dos sistemas de datos fueron cargados en el buque oceanográfico británico James Cook en enero de 2020, y ahora están en camino a las Islas Canarias, España. Los ingenieros del AOML, Ulises Rivero y Pedro Peña, viajarán a las Islas Canarias para preparar el equipo para su despliegue.
La última de las cápsulas está programada para ser liberada en 2024. A medida que el tiempo de la nave para recuperar datos mediante métodos tradicionales se hace cada vez más caro y difícil de programar de forma fiable, las vainas de datos pueden convertirse en una de las únicas soluciones viables para recuperar datos de los instrumentos amarrados en el fondo. Si este despliegue sobre el terreno tiene éxito, el proyecto se unirá al proyecto de series cronológicas de la frontera occidental del AOML, que combina los datos obtenidos en ambas fronteras de la cuenca del Atlántico para ayudar a la detección de cambios a largo plazo en el océano.
Este proyecto está financiado por una subvención de la NASA y el AOML, y dirigido por el científico del CIMAS Denis Volkov.