La NOAA ha seleccionado la bahía de Biscayne, en el sur de Florida, como una de las próximas áreas de enfoque de hábitat en el marco del Habitat Blueprint de la NOAA. Habitat Blueprint ofrece oportunidades para que la NOAA se asocie con organizaciones para abordar los problemas de pérdida y degradación del hábitat costero y marino. Proporciona un marco que se basa en los programas existentes, prioriza las actividades y ayuda a los usuarios a actuar de forma estratégica y preventiva para mantener unos ecosistemas y recursos marinos y costeros resistentes y prósperos.
El OML está situado en Virginia Key, en el sur de Florida, rodeado por las claras aguas de la Bahía de Biscayne. La bahía alberga especies en peligro de extinción, viveros de hierbas marinas y zonas de alimentación para muchos peces valiosos. Las aguas cristalinas de la bahía también sirven de apoyo a la economía regional, al ocio y al turismo. En los últimos 20 años, los científicos del AOML, la Universidad Internacional de Florida, el Departamento de Gestión de Recursos Ambientales del Condado de Miami-Dade y el Distrito de Gestión del Agua del Sur de Florida han observado una tendencia al aumento de las concentraciones de clorofila a, un índice de abundancia de fitoplancton. El fitoplancton, también conocido como microalgas, son plantas microscópicas en la columna de agua, que necesitan luz solar y nutrientes para vivir. El aumento del fitoplancton conlleva la posibilidad de que se produzcan frecuentes floraciones de algas que dañan las praderas marinas al reducir la luz disponible para las mismas.
El aumento registrado del fitoplancton, unido a la reciente aparición de una extensa floración de diatomeas en el sur de la bahía en 2013 y a las macroalgas que sobrepasan los lechos de hierbas marinas en la bahía central, hace que los científicos se preocupen por el futuro del ecosistema de la bahía de Biscayne. Si el fitoplancton sigue aumentando, la calidad del agua clara y prístina de la bahía de Biscayne podría disminuir y las praderas marinas podrían ser asfixiadas causando una pérdida generalizada que sería difícil de detener o revertir.
Los manglares de la Bahía de Biscayne proporcionan refugio cerca de los viveros de hierbas marinas para muchas
especies valiosas. Foto: NOAA
Los residentes de Miami disfrutan de una hermosa puesta de sol sobre la Bahía de Biscayne. Crédito de la foto: NOAA/AOML
Una vista aérea del Cayo Boca Chita rodeado por la Bahía de Biscayne.
Crédito de la foto: Servicio de Parques Nacionales
Chris Kelble, de AOML, codirige el equipo de implementación con Joan Browder, del Centro de Ciencias Pesqueras del Sudeste de la NOAA, con la esperanza de identificar soluciones para mejorar la salud de la Bahía de Biscayne, antes de que disminuya. Con la ayuda del Habitat Blueprint de la NOAA, las organizaciones asociadas pueden desarrollar evaluaciones, experimentos y análisis para, en última instancia, proteger, restaurar y mantener el ecosistema saludable de la Bahía de Biscayne.
Habitat Blueprint ofrece oportunidades de subvención para proyectos de restauración en las nuevas áreas de enfoque de Hábitat de la NOAA. Se espera que se disponga de hasta 1,2 millones de dólares para apoyar proyectos integrales y cooperativos de conservación del hábitat en zonas como la Bahía de Biscayne, FL. El objetivo de Habitat Blueprints es contar con proyectos que sostengan recursos marinos y costeros resistentes y prósperos, comunidades y economías. Las partes interesadas deben solicitar y presentar propuestas que aborden los objetivos únicos y específicos del lugar y los problemas/preocupaciones que se han identificado para la Bahía de Biscayne, con la esperanza de restaurar las áreas degradadas, proteger los hábitats ambientales y fomentar las comunidades costeras resistentes.
Publicado originalmente en enero de 2015 por Shannon Jones