Un estudio muestra que los nutrientes que entran en la Bahía de Biscayne

Los resultados indican un cambio en la calidad del agua

Un análisis de 20 años de datos sobre la calidad del agua muestra que la bahía de Biscayne, un área de enfoque de hábitat de la NOAA en el sureste de Florida, se está degradando, ya que los científicos han identificado señales de alerta temprana que podrían ayudar a informar a los administradores para evitar un cambio de régimen del ecosistema de la bahía.

En un estudio reciente publicado en Estuarios y costas, Los científicos de la NOAA y organizaciones asociadas detectaron una tendencia creciente en los niveles de clorofila y nutrientes de 48 estaciones de vigilancia en toda la Bahía de Vizcaya. El estudio incluyó muestras durante un período de 20 años, de 1995 a 2014, período que coincidió con un rápido aumento de la población humana.

Los datos muestran que el Golfo de Vizcaya se está eutroficando lentamente, o se está haciendo más rico en nutrientes, con un aumento constante de la clorofila a y de los niveles de fosfato en los últimos 20 años. Este aumento es mayor en las zonas cercanas a la costa y semicerradas de la Bahía de Vizcaya, lo que indica que la eutrofización se debe a fuentes terrestres.  

"Si se mantienen las prácticas de gestión actuales, podría producirse un cambio de régimen en la Bahía de Vizcaya, que pasaría de ser un lugar con aguas claras y exuberantes praderas de pastos marinos a un sistema turbio dominado por el fitoplancton", dijo Chris Kelble, oceanógrafo costero del Laboratorio Oceanográfico y Meteorológico del Atlántico de la NOAA y coautor del estudio. "Esto alteraría el ecosistema y las especies que viven en la bahía".

La región superior de la bahía ya ha experimentado períodos de mortandad de pastos marinos, un posible impacto temprano de este cambio en la calidad del agua. Los científicos están trabajando ahora con las municipalidades locales, los administradores de recursos y las organizaciones sin fines de lucro para utilizar los resultados del estudio con el fin de orientar los cambios en la ordenación de las costas y las actividades humanas que impidan nuevos aumentos de la clorofila a y niveles de nutrientes inorgánicos.

"Pudimos sugerir regiones específicas dentro de la Bahía de Vizcaya para dirigir los esfuerzos de gestión costera para tener el mayor impacto en la mejora de la calidad del agua", siad Nicole Millette, becaria postdoctoral del Instituto Oceanográfico de Woods Hole y autora principal del estudio. Millette realizó el estudio mientras era investigadora posdoctoral en el Instituto del Golfo Norte en colaboración con Kelble en el AOML.

Los autores esperan que sus hallazgos sean utilizados para afectar estos cambios antes de que el inminente cambio de régimen se realice en gran parte de la bahía. Una vez que un ecosistema ha cambiado, es mucho más difícil de restaurar que prevenir el cambio. Los científicos esperan que este cambio de régimen pueda ser prevenido y esperan rastrear las posibles mejoras después de que se implementen nuevas medidas y acciones para detener la carga de nutrientes en la Bahía de Biscayne.