Científicos del AOML de la NOAA proyectan futuros cambios en la variabilidad del ENSO

En un nuevo estudio publicado en Nature Communications, los científicos del Laboratorio Oceanográfico y Meteorológico del Atlántico (AOML) de la NOAA investigan los cambios previstos en la evolución estacional de El Niño - Oscilación del Sur (ENSO) en el siglo XXI bajo la influencia del aumento de los gases de efecto invernadero. El estudio revela que se prevé que los impactos climáticos globales sobre la temperatura y las precipitaciones sean más significativos y persistentes, debido a la mayor amplitud y a la mayor persistencia de El Niño en la segunda mitad del siglo XXI (2051-2100).

El ENSO es un patrón climático recurrente que se produce por término medio de 2 a 7 años y que implica cambios en la temperatura de la superficie del mar en el Océano Pacífico central y oriental. El patrón de calentamiento oscilante, o El Niño, afecta directamente a los patrones de precipitación en los trópicos, así como influye fuertemente en el clima de todo el mundo. 

Este mapa muestra las zonas de temperatura superficial del mar que son más altas (rojo) o más bajas (azul) de lo normal. La gran "lengua" roja que se extiende al oeste de Sudamérica forma parte del patrón característico de calentamiento asociado a El Niño. Este mapa concreto de la NOAA, de 2016, muestra uno de los El Niño más fuertes de los que se tiene constancia.

Los episodios de El Niño pueden caracterizarse por tres fases: el inicio (el crecimiento), el pico (la madurez) y la fase de decadencia (la desaparición). La mayoría de los estudios anteriores se centran en los cambios futuros del ENSO durante la fase de apogeo. En cambio, este estudio se centra en los cambios futuros de la evolución estacional de ENSO durante las fases de inicio y decaimiento.

Las fases de inicio y decadencia tienen un impacto directo sobre el clima y los fenómenos extremos en todo el mundo, como las lluvias monzónicas, los ciclones tropicales y los brotes de tornados en los EE.UU. Por lo tanto, existe una necesidad urgente de comprender mejor las características del ENSO bajo la influencia del aumento de los gases de efecto invernadero, y sus impactos sobre la variabilidad y la previsibilidad del clima.

El estudio reveló que se prevé que El Niño crezca a un ritmo más rápido, que persista más tiempo sobre el Pacífico oriental y que tenga impactos remotos más fuertes y distintos. Se prevé un aumento del 20% en la frecuencia de aparición de El Niño en el siglo XXI en comparación con la variabilidad natural prevista. Este hallazgo también sugiere que la influencia antropogénica en la ocurrencia de El Niño surgirá además de la variabilidad natural para 2051-2100.

Diagramas de longitud-tiempo de las anomalías mensuales de la temperatura de la superficie del mar [fila superior, °C] y de las anomalías de las precipitaciones [fila inferior, mm/día] en el Pacífico ecuatorial para los eventos de El Niño de a) el siglo (20C, 1951-2000), b) el siglo XXI (21C, 2051-2100, y c) su diferencia (21C menos 20C).

"El tiempo de antelación para realizar pronósticos estacionales hábiles de El Niño puede reducirse en el futuro, debido al crecimiento más rápido de El Niño, y los impactos climáticos remotos sobre la temperatura y la precipitación pueden exacerbarse, debido al decaimiento más lento proyectado de los eventos de El Niño en el futuro", dijo Hosmay López, científico del AOML de la NOAA y autor principal del estudio. 

Este es el primer intento de informar sobre los futuros cambios proyectados en la evolución espacio-temporal de ENSO, proporcionando un análisis completo no sólo de los cambios en las estadísticas de ENSO, sino también proporcionando un marco dinámico, así como los cambios en los impactos remotos. Este estudio proporciona un avance significativo en la comprensión de los futuros cambios proyectados en las características del ENSO y sus impactos en la variabilidad y previsibilidad del clima.

López, H., Lee, S. K., Kim, D., Wittenberg, A., & Yeh, S. W. (2022). Projections of faster onset and slower decay of El Niño in the 21st century. Nature Communications 13, 1915 https://doi.org/10.1038/s41467-022-29519-7